Persistir es tanto una virtud como una necesidad vital.
Persistir habla de la solidez del carácter.
Persistir habla del valor de los objetivos de una persona, pues lo mantienen en rumbo a pesar de las dificultades.
Persistir habla de la voluntad para vencerse a uno mismo y a las circunstancias, para con ello encontrar mejores caminos.
Solo la persistencia rompe barreras, sean físicas o mentales.
Solo la persistencia nos mueve más allá de nuestra zona de confort.
Solo la persistencia instala hábitos valiosos.
Y de la misma forma, la persistencia junto con las decisiones estratégicas de sustituir conductas permiten dejar atrás hábitos que nos destruyen.
Solo la persistencia nos templa a largo plazo.
La persistencia habla de la fuerza de nuestros valores y de nuestra mentalidad en acción.
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Imagen de jrm - photo en Pixabay
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