Ankur Warikoo; bloguero y autor comenta algo que me quedó como lección para mis hábitos: Hacer las cosas que son importantes son las cosas que te hacen importante. Esas cosas no siempre se practican de forma regular y por eso deben decirse, para no perderse de vista. Es un recordatorio clave de que siempre hay que tener al centro de nuestra jornada y de nuestra agenda aquello que nos impulsará. Ankur comenta por ejemplo que no todos se ejercitan de manera consistente; por eso hay que decirlo.
Hay cosas que son no negociables cada jornada si queremos decir misión cumplida al final de la misma. Sean verbos, personas a conectar, hábitos a realizar; además de anotarlas hay que estarlas reiterando. Nuestra mente funciona con base a la repetición para formas patrones de comportamiento. Así que, elijamos nuestros conceptos más importantes para definir nuestra vida; tengámoslos a la mano y repasemos durante el día cada uno de ellos para asegurar que se ejecuten y nos impacten positivamente.
Lo mismo podemos hacer con nuestros equipos y con nuestras familias para así construir la realidad que queremos a través de conversaciones y acciones de valor.
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Foto de Miguel A Amutio en Unsplash
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