El reflejo del liderazgo: Un compromiso de inteligencia emocional

Los líderes no solo asumen los retos con decisión y claridad de rumbo.

Los líderes también deben asumir el desgaste físico y emocional de sus encargos manejándolo de manera consciente para cuidado de sus equipos y de ellos mismos.

Los líderes no pueden renunciar a ser fuertes en el más amplio sentido.

El carácter y las reacciones de los líderes resuenan en su equipo. El Almirante William McRaven en su libro La sabiduría de la rana señala atinadamente: "Los empleados se alimentarán de la fuerza del líder. Si muestras fatiga y cansancio, y si sucumbes a los desafíos, esto agotará la energía de tus empleados afectando a la organización".

Hace unos días platicaba con uno de mis alumnos sobre liderazgo y profundizaba sobre este aspecto.

Le decía que el líder siempre debe observar las reacciones de su equipo, pues serán un reflejo bastante cercano de su propio temple y criterio. Las personalidades influyen sin duda, pero el líder marca el estándar de lo que es aceptable para manejar una crisis o tomar una decisión.

Al final el liderazgo es por mucho el arte y ciencia de resolver problemas para encontrar mejores realidades.

Y los problemas traerán tensión, incertidumbre y complejidad. Si queremos honrar nuestro rol y capacidad como líderes, debemos trabajar sobre ellos siempre con valor, disciplina y consciencia para reflejar nuestra mejor capacidad de gestión a nuestros equipos.

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Imagen de Wayne Howard en Pixabay