Estoy preparando para esta semana un taller sobre ventas con calidad y calidez.
Me encanta este tema pues comulgo con la idea de tantos expertos de que la venta es un proceso natural en el ser humano. Vender es lo que nos permite acceder a nuestros sueños. Vender es lo que nos permite encontrar puntos de acuerdo en una situación difícil. Y vender nos permite enseñar a otras personas nuestro compromiso con una promesa de valor.
Si no vendemos, si no impulsamos nuestras ideas, perderemos oportunidades tanto como nuestros socios y aliados. Si no damos un paso al frente para exponer nuestro valor, las personas que nos importan como socios o clientes se enfocarán en alguien más.
Vender, por supuesto, nos vuelve vulnerables al rechazo y al cuestionamiento. Pero no avanzar en este tema nos vuelve vulnerables a la frustración y al estancamiento. Por eso, vender no debe ser solamente una actividad profesional.
Vender debe ser una habilidad con prioridad permanente de desarrollo. Y vender con efectividad debe ser nuestro sello y foco diario si queremos impactar positivamente donde quiera que vayamos.
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Imagen de aymane jdidi en Pixabay
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