Hace algunos años leí de John Maxwell sus libros Vivir intencionalmente y Haga que cada día cuente. Ambas obras conectan de inmediato con el liderazgo que debemos ejercer en nuestra vida si aspiramos a ser líderes para otros. Intención significa concentración de recursos y de energía para lograr un mayor impacto. Si somos intencionales somos conscientes de lo positivo o lo negativo que podemos causar. Somos conscientes del valor de nuestro tiempo y el de los demás para asegurarnos que cada interacción sea el más valioso.
Intención significa ¿Para qué hacer esto? ¿Por qué es importante esta acción respecto a mis valores y prioridades? No puedo ser líder si no soy consciente de como influiré en los demás. Por eso vale la pena detenerse durante el día y siempre calibrar nuestras acciones. La intención es la aguja de nuestra brújula y el norte son nuestros valores, nuestra identidad que queremos proyectar a cada momento coherente con nuestros valores.
Si actuamos con intención; estaremos siempre en el camino de construir nuestra visión con nuestras acciones. Así estaremos aprovechando de la mejor manera el tiempo para construir lo que Maxwell resume en una obra de arte cada jornada: La suma de nuestras buenas decisiones que nacen de nuestro compromiso y nuestra disciplina.
Cadena de publicación 25/38

Foto de Mauro Gigli en Unsplash
Comments