Quiero compartirles otra clave para practicar una comunicación consciente.
Esta clave la aprendí de Rob Dial (https://robdial.com/podcast/), autor del libro Level Up.
Este consejo se enfoca en una parte clave de la conexión con otros: Nuestra capacidad de escucha. Es importante recordar que la escucha es un ejercicio de voluntad, de intención. Implica enfocarnos en nuestra contraparte como un ejercicio de respeto y conexión máxima.
Para lograr lo anterior, Rob nos recomienda utilizar el acrónimo LUV. Como anécdota, es muy fácil asociar estas 3 letras con la palabra love (amor en inglés) que nos recuerda que la escucha es un ejemplo de afecto, de dedicación a los demás. ¿Y qué significa el acrónimo para que nos concentremos en escuchar mejor?
L - LISTEN
Aquí es valioso agregar que escuchar con atención plena implica renunciar a otros estímulos.
Podemos asegurarnos de dejar dispositivos fuera de alcance o en silencio. El mostrar ese gesto a nuestro interlocutor le dirá que estamos dispuestos a enfocarnos en la conversación. Podemos también escuchar con el cuerpo además de los sentidos. Adoptar una postura cercana y con contacto visual frecuente es una forma de asegurar esa escucha enfocada.
U - UNDERSTAND
Junto con los gestos de nuestro cuerpo, podemos mostrar comprensión con expresiones de asentimiento. Podemos también hacer preguntas para facilitar que nuestro interlocutor profundice. Podemos dar confianza a nuestro interlocutor si estamos tomando notas sobre sus comentarios.
V - VALIDATE
El punto final de una buena escucha es confirmar lo comentado. Es valioso parafrasear al interlocutor. Es valioso también preguntar al interlocutor si estamos captando todos los puntos clave del mensaje. De esta manera podremos conectar más profundamente y generar más confianza.
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Imagen de Sasin Tipchai en Pixabay
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