Cacería de ideas

Una de las lecciones que más me han gustado de Ryan Holiday es el uso de tarjetas de ideas.

El autor ha construido sus libros con base a tarjetas en las que va anotando ideas o historias relevantes.

Todas estas tarjetas se van recopilando en un archivo categorizado.

Posteriormente este archivo se vuelve un ejercicio parecido a un rompecabezas para armar el hilo conductor de la estructura de un libro.

Ya con ese mapa armado comienza el trabajo estratégico de conectar por medio de la escritura y eventualmente editar para tener un texto completo.

Es así como Holiday escribió Discipline is Destiny, su segundo libro sobre las 4 virtudes estoicas.

Al analizar su método entiendo que cada momento es una oportunidad de recordar algo importante para un proyecto. O bien, en las condiciones más inesperadas podría surgir una idea que sea la chispa para iniciar o bien el eslabón que faltaba de una obra. El punto clave es tener constantemente este recurso de captura de ideas, sabiendo que después podrás conectarlas.

De la mano con este sistema, Holiday lleva la práctica de un diario como muchos otros líderes de diferentes ámbitos. El diario es otro gran depósito para asegurar que una idea que pasa por nuestra mente se quede con nosotros para su posterior análisis. Hoy afortunadamente además de diario físico y tarjetas hay medios digitales con los que podamos enriquecer esta bóveda. De esa forma podremos ser mejores cazadores y curadores de ideas.

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Imagen de Arek Socha en Pixabay