En los últimos 3 años, una de las cosas que más he disfrutado es la preparación y entrega del mensaje de graduación a nuestros alumnos que terminan sus estudios de bachillerato, universidad y postgrado. Mucho antes de tener esta gran responsabilidad, ya disfrutaba el ver algunos de estos discursos en Youtube. Hay grandes ejemplos de Denzel Washington, Oprah Winfrey y obviamente dos muy famosos: El discurso del Almirante William McRaven en la Universidad de Texas, así como el de Steve Jobs en Stanford. Son todos ejemplos tan potentes de una presentación efectiva, memorable, que con gusto te comparto aquí los enlaces, en el raro caso que no los hayas visto antes:
Almirante William McRaven: University of Texas at Austin 2014 Commencement Address - Admiral William H. McRaven
Steve Jobs: Steve Jobs' 2005 Stanford Commencement Address
Oprah Winfrey: Oprah Winfrey's Life Advice Will Change Your Future | One of the Best Motivational Video Ever
Después de verlos, me quedo con algunos puntos clave para hacer un mensaje de graduación significativo para nuestros alumnos:
Ser práctico
Un mensaje o un conocimiento valioso por definición significa que es útil. Puedes ponerlo en práctica inmediatamente después de escucharlo. En este sentido, los mensajes coinciden en lecciones fáciles de asimilar y que se pueden ensayar de forma muy accesible. Incluso, el mensaje del Almirante McRaven resultó tan aterrizado a la realidad, que su primera recomendación, "tiende tu cama" se convertiría en el título de su futuro libro.
Ser personal
Es necesario hablar de conceptos. Pero es vital que el mensaje sea lo más auténtico posible. La forma de lograr eso es conectar el mensaje con nuestra propia historia de vida. El señalar que los puntos del discurso son parte de un aprendizaje que te llevó de un fracaso a un éxito; o relacionar el contenido con una enseñanza familiar genera empatía con la audiencia.
Conectar con las emociones y los sentidos
Nancy Duarte, experta en presentaciones y autora de libros sobre el tema, señala que los momentos en los que se generan aplausos o risas en el discurso son muy importantes. En mi opinión son puntos de retroalimentación que te indican que estás tocando fibras relevantes en la audiencia. Y entre más emociones logres despertar, mayor retención tendrá tu mensaje. Si además, incorporas diferentes ejemplos de involucramiento para los diferentes estilos de aprendizaje (auditivo, visual, kinestésico), entonces tu entrega será todavía más memorable.
Ser concreto
En este aspecto el mejor caso que conozco es el de Steve Jobs. De entrada señala que contará solamente 3 historias o anécdotas. Es una regla relevante que escuché hace muchos años. La mente tiene un reto para procesar información que va más allá de tres elementos al mismo tiempo. Aquí la precisión permite profundizar y posicionar mejor los mensajes.
Espero que con estos consejos puedas hacer discursos de mayor impacto, sin importar si son o no de graduación.
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