Cada día; no cierres la jornada sin reflexionar el camino recorrido.
Autores que van como Og Mandino en temas de desarrollo personal, hasta Michael Hyatt en productividad profesional recomiendan tener un espacio de cierre que cumpla este objetivo. De esta manera refuerzas tus aprendizajes y también valoras tus avances.
Te puedo sugerir algunas preguntas para hacer este ejercicio:
¿Qué cosas te hicieron sentir feliz?
¿A quién serviste hoy? ¿Para quién fuiste una ayuda o un aporte a solucionar un problema?
¿Qué aprendiste?
¿Cómo avanzaste en tus objetivos más importantes?
¿Cómo demostraste afecto y conexión a los que más te importan?
¿Cómo invertiste en tus hábitos?
¿De qué adquiriste consciencia para mejorarte mañana?
Y obviamente, una pregunta que no puede faltar en tu jornada es ¿Qué agradeces?
El valorar las cosas y las experiencias que vives alimenta tus emociones positivas y tu salud.
Seguramente podrás enriquecer esta lista con tus propias preguntas. Te deseo excelentes reflexiones hoy para seguir creciendo el día de mañana.
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Imagen de Cindy Lever en Pixabay
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